El ideal de belleza: ¿Creado por los medios o por la genética?

La idea de que la delgadez es sinónimo de belleza, no es solamente culpa de los medios de comunicación. De acuerdo a un estudio nuevo el deseo de ser flacos o delgados para ser bellos, tiene un componente genético también.

Nadie puede escapar a las imágenes de cuerpos delgados que aparecen en la publicidad, las películas y en cada página de las revistas de moda. La delgadez se ha convertido en un sinónimo de belleza y millones de personas en el mundo -en especial las mujeres- sueñan con lograr ese ideal de supuesta perfección, en ocasiones, sometiendo a su cuerpo a dietas extremas y a ejercicio exagerado.

Pero más allá de culpar a los medios por promover la idea de que la delgadez representa a la belleza, existe un estudio nuevo según el cual la genética también juega un papel importante a la hora de percibir la delgadez como algo bello.

El estudio publicado en la revista International Journal of Eating Disorders realizado en la Universidad Estatal de Michigan, observó que los gemelos (idénticos) son más propensos que los mellizos a tener ideas similares sobre la delgadez y la belleza. Teniendo en cuenta que los hermanos se crían en un ambiente igual o similar, esa diferencia de percepción de belleza entre gemelos (quienes comparten todos sus genes) y mellizos (quienes comparten la mitad de sus genes) sugiere que existe un fuerte componente genético en la percepción de ideal de belleza. Los investigadores le dan el nombre a “internalización de la delgadez como ideal”, que significa, en palabras sencillas, un nivel elevado en su deseo de parecerse a las mujeres que aparecen en las revistas y en los medios.

Teniendo en cuenta que no todas las mujeres son igualmente vulnerables a creer en que ser delgadas significa ser bellas, los psicólogos autores de la investigación se plantearon la pregunta de si existe un componente genético que marque la tendencia en cuanto a la percepción de belleza. Para responder a su inquietud y para probar su teoría, estos psicólogos analizaron las respuestas a encuestas hechas a un total de 343 gemelas entre las edades de 12 y 22 años en Michigan, en Estados Unidos.

Las gemelas que participaron respondieron a preguntas como qué tanto querían parecerse a las mujeres de la televisión, de las revistas y de la publicidad. Mientras más idealizaban esa belleza, más alto era su nivel de “internalización de la delgadez como ideal”.

Después, los investigadores compararon las respuestas a las mismas preguntas que dieron tanto las gemelas y como las mellizas. Encontraron que las gemelas tenían respuestas similares en cuanto al ideal de belleza y su relación con la delgadez. Esto indica, según los investigadores, que los genes juegan un papel importante en qué tan susceptibles son las mujeres a las señales del ambiente en cuanto a ser delgadas. Es decir, que no todas las mujeres reaccionan de la misma manera ante un programa de modelos o un anuncio de ropa interior.

Aunque no se sabe a ciencia cierta cuáles son los genes responsables de este tipo de percepciones, los investigadores piensan que se trata de aquéllos que influyen en la personalidad. El próximo paso en cuanto a los estudios de este tipo consistirá en analizar qué tanta influencia tiene el factor genético en el desarrollo de trastornos alimenticios como la anorexia y la bulimia para lograr la delgadez como ideal de belleza.

Sin duda, este es un tema complejo que necesitará de muchas y rigurosas investigaciones, pero con estos resultados se conocen nuevas claves para entender el por qué algunas mujeres pueden estar más obsesionadas con estar flacas o delgadas y cómo reaccionan ante las imágenes que la sociedad presenta de la belleza.

De cualquier manera, es importante recordarte que la belleza es algo subjetivo y que como dicen por ahí, siempre está en los ojos de quien observa.

Te aconsejo que para sentirte bien con tu cuerpo, lo mantengas activo y lo alimentes sanamente. Vas a ver que así te verás muy bien porque te sentirás de maravilla. Y finalmente, lo más importante es la salud.

 

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