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Siempre que hablamos de adicciones pensamos en sustancias como el alcohol, el cigarrillo y las drogas. ¿Y qué hay de la comida? Un estudio nuevo demuestra que las personas con problemas de peso tienen una relación adictiva con la comida.

Julieta es una chica de 26 años y es obesa. A pesar de que ha intentado por todos los medios posibles bajar de peso, siempre cae de nuevo en la tentación de la comida. Ella misma atribuye su problema de obesidad a una adicción a la comida. Según Julieta, cuando hace dieta y se priva de comer como lo hace generalmente, se desespera, se pone irritable y termina con un festín similar a un atracón de comida.

Si bien es común hablar de tener una debilidad adictiva por la comida, no se había comprobado que puede ser en efecto, una adicción. De acuerdo a un estudio realizado en la Universidad de Georgia, en Estados Unidos, el mismo tipo de comportamiento impulsivo que lleva a que las personas abusen de las drogas, el cigarrillo y el alcohol está presente en quienes tienen una relación que no es saludable con la comida.

Así lo observaron luego de analizar tanto los niveles de adicción a la comida, como los niveles de impulsividad en 233 participantes. Una vez que evaluaron estas medidas, los investigadores compararon los resultados con el índice de masa corporal (IMC), el cual se usa para determinar el porcentaje de grasa y músculo y si existe obesidad.

Los autores del estudio encontraron que, si bien el comportamiento impulsivo no está necesariamente relacionado con la obesidad, sí puede conducir a desarrollar una adicción a la comida. Es decir, no porque alguien es impulsivo se va a convertir en una persona obesa, pero sí observaron que el aumento en ciertos comportamientos impulsivos se asocia a la adicción a la comida, que parece que fue lo que llevó a algunos de los participantes en el estudio a tener un índice de masa corporal más alto.

Pero, ¿qué hace que la comida sea adictiva? Los autores del estudio piensan que quizás se debe a que actualmente abundan en el mercado una variedad de alimentos procesados, con alto contenido de grasa, sodio y azúcar y que contienen aditivos que pueden provocar “antojos” así como lo hacen las drogas ilegales.

Este estudio es de los primero en investigar el comportamiento adictivo en relación a la comida y cómo contribuye a la obesidad, por lo que dará nuevas herramientas para que los médicos y otros especialistas puedan tratar a las personas obesas considerando que podrían sufrir de una adicción.

Es una excelente noticia, ya que, la obesidad se ha vuelto una epidemia en muchos países del mundo. En Estados Unidos, por ejemplo, más de un tercio de los adultos son obesos, y esta condición incrementa el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares, derrame cerebral y ciertos tipos de cáncer.

Si se logra combatir la causa de la obesidad, también se podrán ahorrar miles de millones de dólares en gastos médicos a causa del sobrepeso.

Si tú tienes una relación problemática con la comida y sientes que quizás sea una adicción, considera buscar asesoría médica y psicológica.  Tal como lo hacen los adictos a las drogas, el cigarrillo y el alcohol, un grupo de especialistas puede ser de gran ayuda para que logres tener un peso sano.

Imagen © Thinkstock / BananaStock

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