Saber cómo manejar las emociones en la vida adulta es una de las habilidades más importantes. Nos ayuda a para mantener equilibrio, salud mental y relaciones sanas. Las emociones no son un error ni una debilidad: son señales útiles que nos avisan de algo. Además, son totalmente normales y naturales. La diferencia está en cómo las interpretamos y respondemos a ellas. En este artículo, te ayudaremos para que tengas algunas estrategias para reconocerlas. De tal manera que luego puedas gestionarlas y aplicar herramientas.
¿Qué significa manejar una emoción?
La psicóloga clínica Eugenia Espinoza, directora de Vinclum Psicoterapia, señala que “las emociones no se eligen”. No decidimos sentir rabia o tristeza, pero sí podemos aprender a gestionarlas. Ella propone pasos básicos para comenzar:
- Identificarlas
- Aceptarlas
- Conectarlas con el cuerpo
- Decidir qué hacer con ellas, buscando regularlas en lugar de reprimirlas
Además, resalta dos ideas clave:
- No hay soluciones universales. “Tú y yo no necesitamos gestionar las emociones de la misma manera. Cada uno tiene quizá una emoción que ‘predomina’ por sobre las otras”. Sin contar que cada persona tiene una historia y un temperamento único.
- La regulación emocional es cuerpo y mente. “La gestión de las emociones es muy corporal también”, señala. El cuerpo reacciona antes que la mente, por lo que atender a sus señales, saber cómo actuamos, conocernos, es esencial.
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¿Se gestionan todas las emociones igual?
No. Aunque solemos clasificarlas. Como en miedo, rabia, tristeza y alegría, lo cierto es que casi nunca sentimos una sola a la vez. Según la psicóloga, “solemos tener 2 o 3 emociones al mismo tiempo”. Es decir, etiquetarlas ayuda para gestionar las emociones y prestarles atención.
Aunque no existe una solución para todos por igual. Debido al tipo de emoción que podemos sentir, algunas ideas son:
- Rabia / frustración. Haz una pausa corporal. Así puedes canalizar la energía (ejercicio, gritar solo si estamos un lugar seguro). Y, antes que explotar, podemos usar la experiencia para aprender a poner límites.
- Miedo / ansiedad. Hacer un anclaje corporal (respiración, sensación presente) y evitar bucles obsesivos.
- Tristeza / duelo. Permitirnos sentir el duelo, darle nombre a la emoción y, si nos ayuda, usar rituales (escribir, tener una foto, etc…).
- Alegría. Aprovecharla para conectar con nosotros y los demás. No hay que “compararnos” con momentos de “altibajos”.
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En nuestro siguiente artículo encontrarás herramientas practicas para aprender a manejar tus emociones.
Preguntas frecuentes
¿Qué herramientas ayudan en el día a día? Respiración consciente, journaling, hábitos saludables y hacer lo que nos gusta.
¿Cuándo pedir ayuda profesional? Cuando las emociones afectan tu vida cotidiana, tus vínculos o tu salud mental.
¿Cuánto tiempo lleva un proceso terapéutico? Procesos profundos suelen requerir más de 12 sesiones, o incluso más.
Por Carlos Diego Ibáñez
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