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Si bien la muerte es algo absoluto para todos los seres vivos y de lo único que tenemos la entera certeza desde que nacemos, en muchas ocasiones -especialmente cuando somos jóvenes- nos parece algo muy lejano. “La muerte cada día se produce más lejos de nosotros, se esconde, ya no convivimos con la muerte como en otros momentos de la historia”, señala el psicólogo Claudio Mendoza a Vida y Salud. El momento en el que nos enfrentamos a la partida de un ser querido nuestro mundo y cotidianidad se nos viene abajo. Nos aparecen sentimientos como el miedo, la angustia, el desconsuelo; irremediablemente. Quizá el saber que esperar y sentir la compañía de otros puede ayudarnos a transitar un dolor que es propio de la naturaleza humana como es el duelo.

El dolor

Duelo hace alusión directa al dolor. Existen muchos tipos de duelos diferentes, pero solo aquellos que se refieren a algo querido para nosotros es lo que nos duele más. “Cada persona vive las cosas en intensidad y tiempos diferentes. No existe una normalidad, solo existe lo que se esperaría que ocurriera con las personas que pasan por duelo”, señala el psicólogo Claudio.

Por otro lado, se encuentra la forma en la que nos enfrentamos al dolor por la pérdida. En algunos casos hay muertes que no son esperadas y se dan de manera repentina, como la muerte neonatal o en un accidente; pero un quiebre sentimental también es un duelo. Al igual que nos podemos enfrentar a un proceso largo o esperado que lleva a la muerte, como es el cáncer o una enfermedad degenerativa, como el Alzheimer. 

Vida y salud también conversó con la Fundación Kálida en Barcelona. Quienes responden de manera integral y profesional a las necesidades de acompañamiento complementarias de las personas que conviven con el cáncer (pacientes y sus seres queridos). Laura Bendesky Corenstein, quien es una psicooncóloga mexicana de la fundación, nos comentó acerca de algunas cosas importantes a tener en cuenta a la hora de enfrentar el duelo.

Tiempo al tiempo

Esta profesional señala que es muy difícil poder saber cómo se va a dar el duelo, pero es muy importante que las personas puedan tener la posibilidad de conversar de la muerte. “Cuándo está la oportunidad de dejar todo resuelto, en todo ámbito sin nada pendiente es una gran ayuda en el duelo – comenta-. Pero la realidad es que ocurre en muy pocos casos, muchos se resisten a hablarlo”. 

El estar el mayor tiempo posible con el ser querido que está pronto a partir, es muy importante. Para la psicooncóloga “morir en casa o en un hospital acompañado de los seres queridos puede ser lo mejor. Estar hasta el final produce una sensación positiva en aquellos que quedan acá, en el mundo de los vivos”.  

Algunas claves para un buen duelo

  • Debemos volver a la vida eventualmente. Pero hay que pasar por el duelo, “debemos vivirlo intensamente”, menciona el psicólogo.
  • No hay un duelo malo. Tenemos que escuchar a nuestro cuerpo y entender lo que nos pide. Lo importante es sentir que aquellas cosas que hacemos nos ayuda a vivir mejor el dolor.
  • El duelo es un túnel oscuro, pero tiene ventanas: seguir disfrutando de la vida no significa que estoy dejando a un lado a mi ser querido. “Puedo reír, ir al super, pasear y estar con mi familia, para luego volver a mi proceso de duelo. Debo avanzar, porque seguimos en el mundo de los vivos y hay que vivir”, apunta la psicooncóloga. 
  • El apoyo social es muy importante. La ayuda de las personas debe tomarse como una muestra de cariño de los demás y debemos tomarlo. Vivir el duelo con el apoyo social es clave.
  • Ser un correcto apoyo para quien está de duelo. Las frases que llenan con el espacio con palabras casi nunca caen bien (revisa acá algunos tips). Es mejor hacer acciones y cosas prácticas que ayuden a quien duela, como acompañar en trámites o escuchar.
  • Puede que vuelvas al mismo proceso de duelo en otro momento. La teoría dice que se parte con la negación y la ira, para  terminar con la depresión y la aceptación. “Las fases son móviles y puede que no se presente alguna”, comenta Laura.
  • No tomes decisiones precipitadas. “Hay algunas personas que eliminan todo de quien murió, pero cuando se arrepienten ya es muy tarde”, menciona la profesional de Kálida.
  • Siempre quedará un vacío. Pero es importante ir avanzando y tener el recuerdo de nuestro ser querido que partió. Si necesitas ir todos los días al cementerio, por ejemplo, y eso te ayuda en tu proceso, no puede ser considerado algo malo

“Las personas que deciden pedir ayuda psicológica individual o acudir a algún grupo de duelo, por lo general suelen estar mejor y les ayuda mucho. Y quizá su proceso de duelo es más llevadero y puedan encontrar un poco de sentido a lo sucedido, para finalmente poder aceptarlo. Eso no quiere decir que todos lo tengan o quieran hacer o que se tenga que hacer de manera inmediata tras el fallecimiento. Además, es importante que la gente pueda hacer sus duelos para que no se queden escondidos, y salgan mucho tiempo después o dificulten la vida o las relaciones con los demás”, cierra la psicooncóloga. 

 

Por Carlos Diego Ibáñez
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Imagen: ©Shutterstock / fizkes

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