Skip to main content

Las infecciones más comunes se pueden prevenir siguiendo una serie de precauciones y recomendaciones. A continuación, aprenderás qué es una infección, quién es más vulnerable, cómo se transmiten y cómo puedes protegerte de las infecciones más comunes.

¿Qué es una infección?

Las infecciones son causadas por gérmenes como virus, bacterias, hongos y parásitos. Pero no todos los gérmenes son dañinos. Existen millones de gérmenes en el ambiente, incluyendo algunos que viven dentro de nuestros cuerpos, que pueden no causar ningún problema o que, incluso, nos pueden ayudar a mantenernos sanos. Se requieren ciertas condiciones para que ocurra una infección. Y para que los virus, las bacterias u otros microbios entren al cuerpo, comiencen a multiplicarse y causen una reacción en el cuerpo.

El hecho de que la persona esté susceptible a la infección puede hacerla más vulnerable a ella. Por ejemplo, es más sencillo que una persona que tiene el sistema inmunológico (o de defensa) debilitado, que tiene cáncer u otra enfermedad subyacente, enfermedad del corazón, alguna herida, etc., se infecte.

¿Cómo se transmiten las infecciones?

En cuanto al contagio o la transmisión de las infecciones, puede ser de una persona a otra, el microorganismo puede entrar a través de una herida, o de la nariz, la boca, los oídos, los genitales o el ano. Realmente, a través de cualquier apertura en el cuerpo. O a través de la picadura de un insecto o la mordida de un animal.

Cómo puedes protegerte de las infecciones más comunes:

1.- Lávate las manos correctamente. O sea, con agua corriente y jabón, tallando tus manos por 30 segundos y secándolas. Si no hay agua y jabón disponible, usa desinfectante a base de alcohol, frotándolo en todas las superficies de tus manos por 20 segundos hasta que se sequen.

• Es importante lavarse las manos antes de comer y de preparar comida. Después de ir al baño. Después de sonarte la nariz. Después de acariciar a tu perro. Después de visitar o atender a alguna persona enferma.

• No compartas tus vasos, platos o cubiertos.

2.- Mantén tus vacunas al día. Revisa con tu médico cuáles necesitas, de acuerdo con tu edad. Pueden prevenir enfermedades serias como: la gripe, flu o influenza; la neumonía; el tétano; la culebrilla; la hepatitis A y B; el virus del papiloma humano (VPH); y las enfermedades de la infancia como el sarampión, la rubeola, las paperas y la varicela. Más recientemente, la vacuna contra el COVID-19.

3.- Evita infecciones transmitidas por los alimentos

De acuerdo con los CDC:

  • La higiene es importante. Lava tus manos con agua y jabón antes de empezar a cocinar y asegúrate que todas las superficies y los utensilios que uses estén limpios.
  • Lava la fruta y los vegetales en agua corriente. Pero no laves las carnes, las aves, el pescado, los mariscos o los huevos. Lavar la carne, el pollo, el pavo, el pescado o los huevos crudos puede diseminar gérmenes en el fregadero, en las encimeras o mesadas de la cocina y en otras superficies, y puede contaminar otros alimentos y causar infecciones.
  • Separa los alimentos para evitar que se contaminen entre ellos. Desde que los compras en el supermercado, hasta que los guardas, los preparas (usa diferentes tablas para cortar), y los metes nuevamente en el refrigerador o hielera. Mezclar las carnes, las aves, los mariscos o los pescados crudos con otros alimentos es peligroso. Tampoco mezcles los alimentos cocinados con los crudos.
  • Cocina a la temperatura correcta usando un termómetro. Existen tablas que te proporcionan la temperatura correcta para diferentes alimentos:
    • Aves 165F
    • Pescado con aletas 145F o hasta que la piel esté opaca
    • Res y puerco molido 160F
    • Cortes enteros de res, ternera, puerco y cordero, así como el jamón crudo, 145F
    • Huevos como el quiche y la frittata 160F
    • Los camarones, la langosta, los cangrejos y el cayo de hacha o vieiras, se cocinan hasta que la piel está aperlada o blanca y opaca
    • Las almejas, los ostiones y los mejillones se cocinan hasta que las conchas se abren durante la cocción
  • Refrigera rápidamente. Las bacterias se multiplican rápidamente si las dejas a la temperatura ambiente. Por eso, no se debe dejar fuera del refrigerador o nevera por más de dos horas o por más de 1 hora (si la temperatura es de más de 90F).
  • Mantén tu refrigerador o nevera a 40F o menos.
  • Si vas a descongelar algo, hazlo en el refrigerador o nevera, en agua fría o en el microondas. Nunca lo hagas a la temperatura ambiente.

4.- Evita infecciones de transmisión sexual

Para evitar las enfermedades transmitidas sexualmente (ETS), como la gonorrea, el herpes, el virus del papiloma humano (VPH), la clamidia, la sífilis, o el VIH/SIDA, entre otras, es necesario practicar sexo seguro. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que diariamente se adquieren un millón de ETS, la mayoría asintomáticas. Y que cada año hay 374 millones de infecciones nuevas con una de estas 4: clamidia, gonorrea, sífilis y tricomoniasis. Más de 500 millones de personas de entre 15 y 49 años tienen el virus del herpes. Algunas de estas infecciones se pueden transmitir de madre a hijo durante el parto y/o durante la lactancia. Algunas se asocian con cáncer, infertilidad y/o otros problemas a largo plazo.

Se pueden prevenir:

  • Absteniéndose de tener sexo
  • Si eres activo sexualmente, usando un condón de látex o poliuretano antes de cualquier tipo de sexo. Existen condones femeninos si los necesitas.
  • Limitando el número de parejas sexuales, y asegurándote de hacer exámenes para ETS antes de iniciar una relación sexual
  • Si tuviste sexo con alguien con una ETS, hazte exámenes de inmediato. No te esperes a tener síntomas (podrías permanecer asintomático). Si necesitas tratamiento, no esperes y termínalo.

Desde luego, en lo que se refiere a enfermedades respiratorias, como el COVID-19 y la tuberculosis, que se transmiten en el aire, además de la vacunación en el caso del COVID-19 para la prevención, y del aislamiento en el caso de que alguien contraiga le enfermedad, el uso de medidas de mitigación como el uso de las mascarillas, el distanciamiento físico, la buena ventilación (por lo que se deben evitar grupos grandes de personas en un cuarto) y el lavado frecuente de manos es muy importante. 

Desgraciadamente hay personas que están en alto riesgo de desarrollar una infección severa por COVID-19, por tener un sistema inmunológico debilitado. Esto puede incluir a muchas personas mayores y a muchos otros, incluyendo niños y bebés, con otros problemas médicos (como cáncer, falla crónica del riñón, problemas del corazón, trasplante de órgano, anemia falciforme, diabetes), incluso las mujeres embarazadas, los obesos y los fumadores. Los CDC recomiendan que, para protegerse, se pongan las dos vacunas y el refuerzo (a algunos su médico podría recomendarles un segundo refuerzo); que limiten el contacto con otras personas lo más posible; que se laven las manos con frecuencia; que mantengan distancia física con las personas fuera de su casa; que limpien y desinfecten las superficies que tocan frecuentemente y que eviten los viajes innecesarios.

En esta vida hay cosas que están bajo nuestro control y otras que no lo están. Esta columna incluye las cosas que están bajo nuestro control para prevenir las infecciones.

 

Copyright © 2022 Vida y Salud Media Group. Todos los Derechos Reservados.
Imagen: ©Shutterstock / Prostock-studio

Comentarios de nuestra comunidad