Skip to main content

Un estudio nuevo suma evidencias sobre cómo las complicaciones laborales pueden afectar a la salud. En este caso se trata del desempleo, que podría afectar al corazón de las personas que han perdido el trabajo.  Aquí te contamos más detalles sobre este hallazgo y te damos algunas claves para cuidar a tu corazón mientras buscas un nuevo empleo.

Hay personas que trabajan para vivir, otras que viven para trabajar.  Algunas lo hacen por pura pasión y otras, en cambio, sólo esperan ver las ganancias económicas al final del mes. Sea como sea, el trabajo es mucho más que ganar dinero y tiene distintas repercusiones en cada persona. Entre otras cosas, por ejemplo, puede vincularse con la independencia, la autoestima y el poder.

Tal vez por eso las complicaciones laborales pueden afectar no sólo nuestras relaciones con el entorno, sino también la salud. Y es que los efectos del trabajo se hacen sentir en el cuerpo. Así, por ejemplo, mientras que tener muchas presiones en el trabajo puede afectar el corazón tanto de los hombres como de las mujeres, hay estudios que relacionan a la falta de empleo con más problemas de salud mental.

Ahora, un estudio reciente que ha encontrado que las personas que están desempleadas tienen más posibilidades de sufrir un ataque cardíaco y que perder varios empleos puede ser tan dañino como fumar o tener alguna condición crónica como diabetes o hipertensión.

Se trata de un análisis desarrollado por unos investigadores del Departamento de Medicina Comunitaria y Familiar de la Universidad Duke en Durham, Carolina del Norte en los Estados Unidos, que tuvo en cuenta las respuestas bianuales sobre el estado de desempleo proporcionado entre 1992 y 2010,  entre casi 13,500 personas que participaron en el Estudio de Salud y Jubilación de los Estados Unidos. Luego, las relacionaron con la incidencia de ataque cardiaco en el mismo período de tiempo.

Después de analizar los datos obtenidos, que fueron publicados en la edición en línea del 19 de noviembre de la revista Archives of Internal Medicine, los investigadores encontraron que si bien hay factores que aumentan el riesgo de sufrir un ataque cardíaco (como tener niveles educativos bajos o bajos ingresos, no tener seguro de salud, llevar un estilo de vida sedentario, estar excedido en el peso o ser obeso, sufrir de hipertensión, de diabetes, de una discapacidad o de depresión), las posibilidades eran más altas entre los desempleados y aumentaban con cada pérdida adicional de trabajo, cuando se los comparaba con quienes nunca habían perdido un trabajo.

La jubilación voluntaria, por su parte, no fue asociada con un aumento en los problemas de salud del corazón. Por otro lado, aunque el primer año de desempleo se asoció con un aumento en el riesgo de ataque cardiaco, el desempleo prolongado por más de un año no pareció elevar más el riesgo. Según los investigadores, estos hallazgos parecen aplicarse tanto a los hombres como a las mujeres por igual.

¿Estas atravesando una situación de crisis laboral o conoces a alguien que esté pasando por ella? Toma nota de estas sugerencias que pueden ayudarte a disminuir la tensión y a cuidar la salud de tu corazón, hasta que aparezca tu próximo empleo:

  • Haz ejercicio, esto ayuda a mantener un corazón sano ya que es una gran descarga de energía que te ayudará a disminuir el estrés. Además, ¡es gratis! Puedes ir a caminar al parque o a la playa (si vives cerca de ella), a andar en bicicleta o a nadar. Tendrás más energía y mejor ánimo y puede ser que se te ocurran ideas para ganar algo de dinero mientras encuentras algo fijo.
  • Aliméntate bien. El alcohol y los dulces, por ejemplo, pueden tentarte para hacerte sentir mejor transitoriamente, pero no son buenos para tu salud a largo plazo. Del mismo modo, la comida rápida o barata puede tener más grasas que las que tu corazón necesita para mantenerse sano. Mejor, come más frutas y verduras, alimentos con fibra y proteínas.
  • Socializa y dedica un momento para ti. Aunque tu prioridad sea encontrar trabajo, trata de dedicar un rato del día a tu bienestar: lee un libro, medita, charla con familiares y amigos, escucha tu música favorita o cocina algo sabroso. Lo que sea que te libere un poco de esa carga estresante que significa el desempleo.

Estar sin trabajo es una situación difícil, pero no te desesperes ni dejes de mantener una actitud positiva. Cuando menos lo imagines, seguramente aparecerá ese empleo que tanto estás esperando.

Imágen © iStockphoto.com / Josh Rinehults

Comentarios de nuestra comunidad