Tu guía para tomar los medicamentos para el corazón de la forma correcta

Si tienes problemas cardíacos, seguramente necesitas tomar varios medicamentos, cada uno para tratar un síntoma diferente. Pero para que estas medicinas logren resultados positivos, es esencial que los tomes a la hora y a las dosis indicadas, y que te informes de cuál es su función, así como de sus posibles efectos secundarios. Aprende a tomarlos de la manera correcta.

Según las estadísticas de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association), dos tercios de los pacientes con problemas del corazón no toman sus medicamentos de la manera exacta como se los receta el médico, y la causa de un 10% de todas las admisiones al hospital es tomar los medicamentos de la forma equivocada. Para que las medicinas te ayuden a mantenerte saludable, sigue al pie de la letra las instrucciones del médico. De lo contrario, puede que no funcionen adecuadamente, y que además experimentes riesgos y efectos secundarios, que pueden ser desde leves hasta muy serios.

Los medicamentos forman parte del tratamiento para reducir el riesgo de problemas cardíacos futuros. Tomarlos correctamente debe formar parte de tu rutina diaria, como cepillarte los dientes o lavarte la cara, pero si no sigues las instrucciones del médico, estás arriesgando tu salud. Por suerte, puedes tomar medidas para que te sea más fácil resolver ese problema, y esto es especialmente cierto si tienes más de una condición y debes tomar medicamentos para tratarlas.

Para evitar confusiones y hasta errores graves, a continuación encontrarás una lista de consejos que pueden hacerte la tarea más sencilla.

Los puntos que debes tener en cuenta:

Haz una lista de todos los medicamentos que tomas. Si tienes más de un médico, es posible que ninguno de ellos sepa lo que te han recetado los demás, y algunos medicamentos pueden interactuar con otros o tener reacciones desfavorables.
Incluye en la lista los medicamentos sin receta que sueles tomar, así como vitaminas, suplementos y remedios naturales o a base de hierbas. Y actualiza la lista cada vez que haya algún cambio.
Enséñales la lista completa a todos tus médicos cada vez que vayas a la consulta. Tener la lista a mano, ayuda al médico a concentrarse en los puntos importantes y a contestar tus preguntas.
Habla abiertamente con el médico y asegúrate de entender sus instrucciones y a seguirlas al pie de la letra. Si no entiendes algo en la etiqueta del envase, llévaselo al médico en tu próxima visita.
Pregunta el nombre de la medicina, por qué debes tomarla y cuáles son sus efectos secundarios y su interacción con otras medicinas, así como lo que debes hacer si sientes algunos de esos efectos.
Pregunta por cuánto tiempo debes tomar la medicina y cómo puedes saber si está funcionando. Si es preciso, pídele al médico o al farmacéutico que te dé por escrito todos los detalles anteriores.
Si notas que el medicamento no te está haciendo el efecto deseado, díselo a tu médico. No tomes por tu cuenta más cantidad (ni menos) de la recetada.
Habla con el médico o con el farmacéutico sobre el costo de la medicina. Si te parece demasiado alto, tal vez el médico pueda recetarte una similar a un precio más bajo.

Tomar los medicamentos en la manera correcta es vital para que el tratamiento tenga éxito. Pero no siempre es fácil, mucho más si tu lista de medicamentos es larga. ¿Cómo puedes saber si los estás tomando correctamente o no? Hazte las siguientes preguntas. Si tu respuesta es afirmativa a cualquiera de ellas, necesitas aprender cómo tomarlos.

¿No sabes si se trata del medicamento original o de uno genérico?
¿Te olvidas a veces de tomar tus medicamentos?
¿Te ves un día sin tus medicamentos simplemente porque te has olvidado de reponerlos?
¿Guardas en los envases de medicamentos píldoras ya caducadas (expiradas)?
¿Dejas de tomar un medicamento recetado por el médico en cuanto te sientes mejor, sin consultarlo antes con él o ella?
¿No sabes el nombre de los medicamentos que tomas, para qué son y lo que pudiera suceder si dejaras de tomarlos?
¿No sabes exactamente cuáles son los riesgos y los efectos secundarios de los medicamentos que tomas, y qué debes hacer si esos efectos se producen?

Bueno, nadie es perfecto. Así que si has venido cometiendo algún error, este es el momento de corregirlo. Sigue estos consejos para que puedas tomar adecuadamente todos tus medicamentos:

Sé constante. Tómalos a la misma hora todos los días para establecer una rutina y evitar que se te olvide tomarlos.
Combina el horario de tomarlos con otra actividad. Por ejemplo, acostúmbrate a tomarlos con una de tus comidas, o con una actividad que realizas a diario, como ducharte.
Guarda las píldoras en un estuche (una cajita) especial para ellas, con compartimientos para cada día de la semana. Así no te confundirás cuando las tomes. Si tomas unas píldoras por el día y otras por la noche, utiliza dos estuches de diferente color.
Pídeles a tus familiares que te recuerden que tomes tus medicamentos.
Prepara un recordatorio. Fija un calendario (almanaque) pequeño al botiquín, al refrigerador (nevera) o a un sitio visible, y cuando tomes tus medicamentos haz una marca en ese día.
Pregúntale al médico o al farmacéutico si debes tomar el medicamento a la hora de comer, y si debes evitar la aspirina, ciertos alimentos, vitaminas u otros remedios cuando lo tomes.
Prepárate si te vas de viaje. Lleva suficientes medicamentos para un par de días extra por si hay alguna demora. Si viajas por avión, llévalos contigo en vez de ponerlos en una maleta. Así los tendrás a la mano si los necesitas.

Para evitar errores:

Después de una hospitalización, es frecuente cometer errores al tomar los medicamentos, sobre todo en los pacientes con problemas cardíacos. Según un estudio publicado en Annals of Internal Medicine, más de la mitad de los pacientes que estuvieron hospitalizados por un ataque cardíaco o por insuficiencia cardíaca cometen errores cuando los dan de alta, algunos tan graves que llegan a poner en peligro su vida. Los errores más comunes incluyen no tomar el medicamento recetado, saltarse una dosis, tomar la dosis incorrecta, no reponer el medicamento a tiempo y dejar de tomarlo antes de tiempo. Para evitar errores, toma estas precauciones:

Escribe todo lo que el médico te diga sobre los medicamentos antes de que te den de alta en el hospital, incluyendo los efectos secundarios más comunes. Pídele a un familiar o amigo de confianza que esté presente y tome nota.
Pídele al médico que te repita las instrucciones hasta que te asegures de que las entiendes bien.
Adquiere todos los medicamentos en una sola farmacia. Los farmacéuticos llevan la cuenta de los medicamentos y te advierten de cualquier interacción entre ellos.
Lee con cuidado toda la información que viene con el medicamento, y ten en cuenta las advertencias sobre los efectos secundarios.
No esperes a que un medicamento se termine para reponerlo.

De ti depende en gran parte mantener el control de la salud de tu corazón. Si te esfuerzas en hacer cambios en tu estilo de vida (no fumar, llevar una dieta sana, mantener el peso apropiado, practicar una actividad física según tus condiciones…), y si además aprendes a tomar tus medicamentos de la forma correcta, tendrás gran parte de la batalla ganada.